domingo, 12 de abril de 2009

Vicuñita, vete a pastar



Aquí otro excelente artículo de Gustavo Rodriguez sobre la educación cívica y los valores.

El Comercio
Por: Gustavo Rodríguez


Cada vez que hay una campaña electoral, nuestros candidatos se dedican a ofrecer cosas concretas como empleos, viviendas, irrigaciones, carreteras, colegios. Es suicida aquel que habla de aspectos abstractos como ciudadanía, justicia, equidad. No los culpo mucho, la verdad. Aparte de que nuestra población tiene un serio déficit en educación cívica que se ha acumulado por décadas —nuestros políticos son producto de ello— un candidato no puede invertir su tiempo de campaña en enseñar: solo nos queda rezar porque en la posesión de su cargo haga énfasis en los valores más que en los ladrillos. Es curioso notar cómo nuestra obsesión por lo tangible nos acompaña desde que nacimos como República. Basta con ver nuestro escudo nacional. A cualquier niño peruano se le enseña lo obvio: el árbol de la quina, la vicuña y la cornucopia que arroja monedas simbolizan nuestras riquezas de la fauna, de la flora y del subsuelo. Somos un país riquísimo, es la conclusión. Nuestro escudo lo grita —y nuestros escolares lo repiten— como si tener riquezas naturales fuera la garantía de la grandeza de un país. Pamplinas, y usted lo sabe. Suiza no tiene mar, y es una potencia marítima mercante. Corea del Sur no tiene ni un décimo de nuestros minerales, y vaya si no nos lo vende multiplicados por diez en forma de autos y artefactos.

Cómo me gustaría que en lugar de tener un escudo que nos repite que somos un almacén de materia prima, nos mostrara en cada sello y acto oficial que son los valores aquello que nos caracteriza. Que la quina fuera reemplazada por una justicia más enraizada. Que la vicuña saliera del encuadre para que la solidaridad se ponga a pastar en su lugar. Que la cornucopia no arrojara monedas, sino mentes llenas de honestidad, educación y creatividad. ¿No es curioso, acaso, que los escudos de los países que admiramos muestren ideales y valores antes que recursos naturales? Pero no soy tan ingenuo. Cambiar nuestro escudo por uno que inspire valores no va a transformar mágicamente la idea que tenemos de nosotros como país. Sin embargo, sí me gustaría que empezáramos a verle otro significado a los tres campos que lo forman, y que así lo enseñáramos en nuestras escuelas. Que viéramos en la vicuña un símbolo no de carne y lana, sino de biodiversidad y de refugio mundial contra la depredación. Que viéramos en el árbol de la quina no un ejemplo de acumulación vegetal, sino las oportunidades que tiene nuestro país para hacer los descubrimientos biológicos que esconden nuestra flora inmensa. Que viéramos en la cornucopia no los recursos que, una vez extraídos, no volverán jamás, sino la oportunidad de generar con sus ingresos más educación para nuestra gente. Porque una cosa es clara: jamás seremos un país de primer mundo mientras nos sigamos reconociendo en la patética imagen de un mendigo sentado en banco de oro. ¿Cambiamos el escudo o cambiamos nosotros?

(*) ESCRITOR Y COMUNICADOR. TORONJA COMUNICACIÓN INTEGRAL

sábado, 4 de abril de 2009

Estudiar la educación peruana


Foto: Perú País Diferente

Una rica tradición. La hora exige soluciones para el sector educativo, pero estas solo se buscan en experiencias extranjeras y no en nuestros grandes pedagogos.

El Comercio
Suplemento Dominical


Por: Mario Tejada

Ver la educación peruana a través de nuestros propios ojos es todavía un deseo de muy pocos maestros, investigadores y estudiosos de la educación. Constantino Carvallo señalaba que no podía implementarse una reforma educativa si como base no se promovían los valores. Sabemos el grado de corrupción en que nos encontramos, sin embargo, no existe una preocupación por estudiar y superar tan grave problema en el ámbito educativo. Nos encontramos ante un caso de ceguera, de ignorar nuestra realidad, y sin embargo nos empeñamos en capacitar a los maestros con las últimas tecnologías y experiencias de otros países.

Recuperar experiencias
¿No existen experiencias pedagógicas en el Perú que nos permitan superar el estado en que nos encontramos? La respuesta es sí; entonces, ¿por qué no lo hacemos? Ocurre que siempre creemos que las soluciones a nuestros problemas deben importarse, que los extranjeros tienen la llave del éxito. Otra razón es que ignoramos a los grandes paradigmas de nuestra educación pues no existe una historia de la misma ni de su pensamiento pedagógico.

Así como la asignatura de Historia del Perú se ha reducido al mínimo en nuestra educación básica, algo que debe llevarnos a profunda reflexión, es también grave que en la mayoría de centros de enseñanza pedagógica no se dicte un curso de historia de la educación peruana.

¿Los olvidados?
Existirían más posibilidades de mejorar si los jóvenes supieran, por ejemplo, quién fue Javier Prado y por qué fue nombrado maestro de la juventud en la década de los años 20 del siglo pasado. Igualmente, si estudiaran el libro de Luis E. Valcárcel sobre la educación inca y sus tesis sobre la enseñanza del indio y el campesino.

Más conocido pero no estudiado lo suficientemente es José Antonio Encinas, su experiencia de Escuela Nueva en Puno es de una actualidad admirable. Lamentablemente, el grueso de los estudiantes de pedagogía y sus profesores no la conocen. Emilio Barrantes, si bien se recuerda su nombre, pocos conocen el extraordinario trabajo que realizó en la escuela de Paca, y que puede servir de ejemplo para vincular la escuela con la comunidad.

Walter Peñalosa es recordado por los maestros de La Cantuta. Creador de esta famosa escuela pedagógica, experiencia que no ha sido igualada y cuyos ejes formativos todavía pueden ser fuentes de inspiración para la formación de nuevos profesores líderes.

Leopoldo Chiappo estuvo vinculado a la más importante reforma educativa del Perú. Lo mismo vale para el caso de Augusto Salazar Bondy, uno de los más grandes pensadores peruanos de la segunda mitad del siglo XX (actualmente un desconocido para muchos). Su excepcional idea educativa se encuentra en el limbo del olvido. Chiappo planteó los problemas de nuestro país en su verdadera dimensión, colocando la educación en el sitial que le corresponde: “Creo —dijo— que la educación no es el remedio de los problemas nacionales porque estoy convencido de que las soluciones deben ser dadas por una transformación total de la colectividad peruana”. Su obra: “Historia de las ideas en el Perú contemporáneo”, debería ser de lectura obligada de todo peruano que se precie de haber adquirido una educación básica.

La gran transformación
Cuando al profesorado se le señale como al gran culpable del estado calamitoso de la enseñanza, y no como el producto del estado de crisis en que nos encontramos, el pensamiento de Salazar Bondy adquiere una especial vigencia que constituye la base para la solución de nuestra crisis educativa.

Para que el profesor vuelva al sitial que le corresponde, que es el que señaló José Antonio Encinas: “El más alto cargo que un ciudadano puede desempeñar en una democracia, es el de maestro de escuela”, hay que ver la realidad con nuestros ojos, que son los de Garcilaso de la Vega y Huamán Poma de Ayala, y con las de dos grandes personalidades del Siglo XX: José María Arguedas y Jorge Basadre.

Mirando el porvenir



Las lecciones de Luis Jaime. Norma Editorial ha reunido en un volumen una selección de artículos publicados por el Dr. Cisneros en la última década en diferentes medios. Lúcidas reflexiones de un hombre entregado a la educación y, por tanto, con vocación de futuro.

El Comercio
Suplemento El Dominical


Por: Carlo Trivelli

“(...) el porvenir, el futuro, no está allá lejos, ni es inaccesible, como suele creerse. Ahora que lo nombro acá ante ustedes, estoy en el instante inicial que nos conduce a él. No es que allá nos espera el futuro, al final de la ruta. Es que estamos empezando, acá y ahora, a construirlo”. Con estas frases recibió Luis Jaime Cisneros a los alumnos que recién ingresaban a la Universidad Católica el año pasado. No hay que reparar solamente en la necesidad de vivir el momento y no postergar el trabajo ni la responsabilidad que habita esas palabras. Hay que darse cuenta de que Luis Jaime, un hombre en la primavera de sus 87 años, está hablando en primera persona del plural. Está diciendo “nosotros”. Está hablando de nuestro futuro, el suyo, el mío y el de los muchachos y muchachas que lo escucharon ese día en la Católica. Así es su mirada: llena de porvenir, de porvenir compartido.

Esos son los detalles que yo, que lo conozco bien, disfruto más en sus textos. Pero el motivo de estas líneas es más bien subrayar los grandes temas que esa mirada suya convoca y que, afortunadamente, Norma Editorial ha reunido en un libro, sacándolos del olvido de los archivos periodísticos, bajo el título de “Aula abierta”. La selección, de artículos publicados en la última década, viene prologada por Fidel Tubino y ofrece una amplia gama de temas, todos, sin embargo, estrechamente vinculados: política y nación, juventud y porvenir, lenguaje y universidad, elogios de la lectura, semblanzas de amigos ilustres y, por supuesto, reflexiones acerca de la educación. Son estas últimas las que acaparan mi atención.

Temas de educación
En unas 100 páginas del libro, el apartado dedicado exclusivamente a las reflexiones sobre la educación (en los otros el tema aparece siempre, aunque no sea el centro de atención) nos permite descubrir los ejes del pensamiento de Cisneros. En primer lugar, la relación —la identidad más bien— entre política y educación. A Luis Jaime le gusta repetir frases y esta, venida de la Grecia antigua, es la que viene al caso: “El primer objetivo de la política es la educación; el segundo objetivo, la educación; y el tercero, la educación”. Pero ojo, no se trata de una aspiración, sino de todo lo contrario, de la recta manera de entender tanto política como educación, como aquello que atañe a la vida de la comunidad y el desarrollo individual y social de sus miembros.

Bajo este gran paraguas desfilan las reflexiones acerca de la democratización del país y la educación, de la consecuente necesidad de una educación bilingüe allí donde sea necesaria, de las miserias de la educación cívica o las miopías de la formación para el trabajo que imparten nuestras escuelas y de la necesidad imperiosa de la lectura. Y así, de los grandes temas nacionales el maestro se va acercando a las perspectivas más personales e íntimas que, en el mundo de la educación, son dos: la de los profesores y la de los alumnos. Y ahí se establecen, como pilares inamovibles, la convicción de que enseñar es una vocación (y que por tanto el ejercicio profesional no puede verse mellado por otro tipo de consideraciones, sean estas económicas o sociales) y de que el proceso de educación es algo que el maestro hace brotar en el alumno para que este se descubra a sí mismo y sepa quién puede ser y aspire a serlo. Todo un mundo.

Esta página no puede ser más que una invitación a la lectura de “Aula abierta”, pues resulta imposible resumir en tan pocas líneas la profundidad y la riqueza que encierran las reflexiones de Luis Jaime Cisneros ahí reunidas, como también resulta inútil intentar calzar, en estos últimos tres renglones, mi cariño y mi admiración.

domingo, 1 de marzo de 2009

El sueño de la Interoceánica en el centro del país


Infografía elaborada por el diario El Comercio y publicada el 13 de septiembre del 2008 en su pág. A16

Entre frías punas, nublados parajes y escarpadas pendientes de los Andes se abren trochas para el futuro Corredor Interoceánico desde Chimbote, Perú, hasta Cruzeiro do Sul, Brasil.

El Comercio
Por: Javier Ascue Sarmiento


La fuerza destructiva de la naturaleza no los puede vencer. Esa es la consigna de veinte alcaldes provinciales y distritales que participan desde hace ocho años en la construcción de la carretera de penetración desde Chimbote (Áncash) hacia la ciudad de Tocache (San Martín) y que defienden sus valiosas obras viales de huaicos y desmoronamiento de cerros en esta parte de la Cordillera de los Andes.

Para los pobladores de los distritos, caseríos y villorrios de las provincias ancashinas de Pallasca, Santa, Sihuas y la provincia Pataz de La Libertad, los primeros 201 kilómetros de carretera afirmada y 130 restantes de trochas constituyen una trascendental alternativa para hacer realidad la vía Interoceánica que uniría a nuestro país desde el puerto chimbotano con el Brasil hasta el estado de Cruzeiro Do Sul, la región ganadera más rica del país vecino.

Brigadas de pobladores y trabajadores apoyados por maquinaria pesada de cada municipio se dedican a rescatar estas trochas carrozables que se extienden hasta las cumbres más elevadas de la Cordillera Negra.

Un equipo de El Comercio recorrió parte de la primera etapa de esta red vial por la ruta Chimbote-Pallasca hasta las estribaciones del centro poblado Mayas del distrito de Conchucos, muy cerca de la construcción del puente Santo Cristo sobre el caudaloso río Marañón. Aquí se divide la sierra oriental con la selva de San Martín, Huánuco y Ucayali.

Aunque la intensa neblina, la furia de las lluvias y el frío sobre los 4.000 metros sobre el nivel del mar no permiten por ahora recorrer todo los tramos, los pallasquinos y conchucanos viven orgullosos de su obra vial.

El territorio que atraviesa esta vía de penetración presenta una topografía muy accidentada, salvo las vertientes de los ríos Santa, Tablachaca y Mayas cuyas suaves caídas a ambos lados de la Cordillera Occidental facilitarán ensanchar estas trochas carrozables de los actuales tres metros a siete, para convertirse técnicamente en la Carretera Interoceánica completamente asfaltada.

La longitud de esta primera etapa es de 495 kilómetros hasta la localidad de Shunté, en la provincia de Tocache (San Martín), y por su tamaño se le considera un megaproyecto. En la selva solo falta abrir una trocha carrozable de 38 kilómetros entre San Pedro de Chonta y Ajenjo (Huánuco) para unir Chimbote con Pucallpa a través de las carreteras Fernando Belaunde y Federico Basadre.

SUEÑO DE DÉCADAS
El sueño dorado de los pobladores de estas comarcas es acceder a los beneficios del mercado nacional y posteriormente al internacional. Uno de los más esperanzados es Manuel Aparicio Rafaile, alcalde del distrito de Pallasca, en la cumbre más alta de la cordillera.

El alcalde cuida los 52 kilómetros de trochas que han construido desde el centro poblado Sacaycacha hasta las orillas del río Quiroz, donde la carretera se desvía hacia Ancos y Cabana.

El burgomaestre, quien confesó que no escatima en invertir las rentas municipales para mantener esta vía, anunció que dentro de tres meses Pallasca será el primer distrito que recibirá más de S/.17 millones del Gobierno Regional de Áncash, correspondiente al canon minero, para asfaltar este tramo hasta la plaza de armas de su ciudad, a la que llama cariñosamente “el balcón del cielo”. El siguiente paso será continuar por las trochas hacia los distritos de Lacabamba y Conchucos, por donde pasa el trazo original de la carretera que ellos proponen como Interoceánica.

DE EXPORTACIÓN
Esta vía reúne todos los requisitos para ser el soporte de un corredor económico que beneficiaría a los distritos más alejados.
Distritos como Pallasca y Conchucos no cuentan con valles agrícolas por ser su geografía ascendente hacia las cumbres, pero sí tienen una diversidad de pisos ecológicos y variados climas que permiten una agricultura de sustento.

Para el teniente alcalde de la municipalidad de Conchucos, Lizandro Quiñónez, la carretera Chimbote-Pallasca-Tocache es de trascendental importancia y cuenta con el apoyo de las 60 municipalidades involucradas a lo largo de todo el proyecto.

Sin embargo, lamentó que aún existan problemas ancestrales en Conchucos y Mayas como los litigios por la tenencia de tierras, por motivos familiares, políticos y hasta por intereses personales.

Ahora muchos quieren que la carretera pase por el centro de sus pueblos e incluso proponen variantes hacia las punas de Yanabamba, San Miguel, Chingalpo y Uchos, en la provincia de Sihuas. “Queremos apoyar porque una carretera es para todos”, aseguró Quiñónez.

Victoriano Villanueva Arias, teniente gobernador del centro poblado de Mayas, confirmó que solo faltan 12 kilómetros para unirse a Quilcas y de allí al puente Santo Cristo. Los trabajos, señaló, han sido paralizados por las lluvias y el incremento del caudal de los ríos.

“Pero los pobladores están muy contentos porque con la culminación del puente, la provincia de Tayabamba se incorpora a la vía internacional. Un sueño de hace 40 años”, afirmó.

Dos leyes pendientes para redes viales
El congresista ancashino Wilder Calderón reconoció el esfuerzo y decisión de los alcaldes de las municipalidades circundantes a la carretera Chimbote-Pallasca-Tocache por hacer realidad esta vía de penetración a la selva. “Es una obra de ayuda mutua y cooperación”, señaló.

Calderón dijo a El Comercio que, ante este ejemplo de unidad para el desarrollo de los pueblos, se ha comprometido a impulsar, junto con otros parlamentarios, la ley de la mancomunidad municipal que se encuentra pendiente en el Congreso de la República.

Wilder Calderón aseguró que esta ley permitirá que los alcaldes inviertan recursos económicos de las municipalidades en la construcción de tramos carreteros.

Al ser informado que existen tramos de esta vía que no han sido ejecutados por falta de estudios definitivos, manifestó que también está pendiente una ley de emergencia para que el Gobierno Regional de Áncash pueda invertir en estas obras.

Brander Pereda López, director de Imagen Institucional de la Comisión Técnica Carretera Chimbote-Pallasca-Tocache, confirmó que además del apoyo de los pueblos, los presidentes regionales de La Libertad, San Martín, Huánuco, Ucayali y el Gobierno Central se han sumado a este proyecto.

“Sin embargo, es lamentable la actitud del presidente de la región Áncash, quien ha señalado que no apoyará el proyecto mientras se encuentre en el cargo”, arguyó Pereda.

MÁS DATOS

Por ahora existen solo dos grandes rutas oficiales de la Carretera Interoceánica que tienen origen en las costas peruanas y desembocan en las orillas atlánticas de Brasil.
La del norte comienza en Paita y cruza Piura, Moyobamba, Yurimaguas e Iquitos.
La del sur inicia en tres puntos: El puerto San Juan de Marcona (Ica), el puerto Matarani (Arequipa) y el puerto Ilo (Moquegua). Las tres rutas se unen en el puente Inambari , entre Cusco y Madre de Dios, para seguir hasta Brasil.

miércoles, 18 de febrero de 2009

"Debemos hacer lo que nos gusta"


Foto: El País

Mario Capecchi es Premio Nobel de Medicina 2007 junto con Martin Evans y Oliver Smithies. Para su tesis tuvo como asesor a James Watson el padre de la genética moderna. En su infancia mendigó para sobrevivir. Victima de la irracionalidad de la guerra se separó de sus padres a la edad de 4 años. Llegó a los Estados Unidos, poco tiempo después, luego de reunirse nuevamente con su madre. A partir de ahí se dedicó al estudio de las ciencias profundizando su investigación en la genética. Es ahora profesor de la Universidad de Utah. Aunque la mayor parte de su vida la vivió en los Estados Unidos él no olvida su origen italiano por lo que mantiene una relación cercana con Italia.

La vida de Capecchi es una buena lección de esperanza y superación. En la entrevista confirma lo importante que es enfocar nuestra vida en aquello que verdaderamente nos apasiona hacer, en aquello que nos emociona, ahí donde nuestro talento desarrolla lo mejor de sí hasta convertirse en virtud. Sin duda esta es la clave del éxito.

El Comercio
Perú

Por: Bruno Ortiz Bisso


La vida de Mario Capecchi (Verona, 1937) fue realmente dura: perdió a su padre en la Segunda Guerra Mundial y en 1940 su madre fue llevada a un campo de concentración. Tras pasar un año al cuidado de unos campesinos, fue abandonado en la calle. Tuvo que mendigar para vivir y formó parte de pandillas juveniles italianas. En 1946 enfermó de tifus. Ese mismo año fue hallado por su madre, que había sobrevivido al campo de concentración, y se lo llevó a EE.UU. Capecchi recién aprendió a leer y a escribir a los 13 años. Sin embargo, siempre tuvo hambre de aprender.

Sobre los 17 años se interesó en resolver los problemas sociales de la humanidad y hasta tuvo un acercamiento a las ciencias políticas. Finalmente, se decidió por las ciencias y estudió en la Universidad de Harvard, donde se doctoró en biofísica en 1967. En el 2007, junto con Martin Evans y Oliver Smithies, recibió el Premio Nobel de Medicina y Fisiología por descubrir cómo manipular genéticamente células madre embrionarias de ratones, neutralizando uno o más genes. Esto se aplica actualmente en casi todos los terrenos de la biomedicina.

Esta semana estuvo en Lima para participar en un seminario internacional sobre células madre, organizado por el Colegio Médico del Perú.

Capecchi señaló que le siguen gustando el estudio y la investigación, y en sus disertaciones invita a todos a no perder el gusto por aprender, sin importar la edad.

¿Qué tan importante es la edad para aprender? ¿Realmente nunca es tarde?
Mientras crecemos nuestro cerebro va cambiando. Por ejemplo, antes de caminar los bebes deben gatear y para ello hay un proceso. Creo que hay un tiempo óptimo para empezar a aprender, pero eso no está escrito en una piedra y puede cambiar. Todo depende de cómo y cuánto usemos nuestro cerebro. Cuando viví solo, tuve que usarlo mucho para encontrar dónde dormir, qué comer y cómo cuidarme yo mismo. No hay una edad para aprender, pero lo importante es que siempre estemos usando nuestro cerebro; que nuestras neuronas estén siempre en actividad.

¿Aún sigue con sus investigaciones de manipulación genética en ratones?
En lo que estaba trabajando hace cinco años es distinto a lo que estoy haciendo ahora y lo que haga en cinco años más será otra cosa. Siempre voy cambiando de áreas. Cuando trabajas en cáncer, conoces a gente que lleva años en esto, con los mismos conocimientos. Luego, por ejemplo, pasas a biología y conoces a gente totalmente diferente. No es solo cambiar de campos, sino también de la gente con la que interactúas. Y lo importante es siempre empezar de cero. Es decir, llegas a un nuevo campo y ves gente que piensa de una manera y que manejan un solo conocimiento y lo que deben hacer o no. Pero el nuevo no tiene esos prejuicios y puede hacer las preguntas que nadie hace. Y así uno sigue siempre aprendiendo.

¿Cuál es la principal reflexión que les da a los demás a partir de su extraordinaria experiencia de vida?
Me parece que lo más importante es que la gente encuentre algo que le apasione, que le interese y que lo haga pensar. Y debe perseguirlo hasta que alcance sus objetivos. Hoy la gente trabaja mucho en lugar de hacer algo que realmente los emocione. Debemos hacer lo que nos gusta. Hay que recordar que la vida es un viaje que no tiene un rumbo fijo. Las cosas suceden, no se anticipan y van en distintas direcciones. Es como saltar de un lado a otro, que es lo que yo hago.

jueves, 12 de febrero de 2009

Ray Kurzweil to head futurology school backed by Nasa and Google


Ray Kurzweil speaks on Singularity at the RAS Conference 2007 in San Francisco, Feb. 7, 2007.
Photo: Gabriel Bouys/AFP/Getty Images
Tomado de Wired


The Guardian
February 3 2009

An American inventor who plans to live for ever has been appointed head of a new school for futurologists backed by Google and the US space agency Nasa.

Ray Kurzweil, who worked as a computer scientist before turning to future gazing in the late 1980s, will become chancellor of the Singularity University based at Nasa's Silicon Valley campus in California.

The institution gains its name from a controversial 2005 book by Kurzweil, entitled The Singularity is Near. In it, he argues that the exponential advance of technology is set to transform society by giving rise to computers that are more clever than humans. The leap in computing power will drive rapid advances in other fields, he claims, that together could solve the problems of climate change, poverty, famine and disease.

In an earlier book, Kurzweil predicts the creation of "nanobots" that will patrol our bloodstreams, repairing wear and tear as they go, and keeping our bodies perpetually young.

"The law of accelerating returns means technology eventually will be a million more times powerful than it is today and cause profound transformation," Kurzweil told Associated Press after his appointment was announced.

The new institute will offer courses on artificial intelligence, nanotechnology and biotechnology and is due to open its doors to its first class of 30 students this summer.

Kurzweil began discussing the concept for the school two years ago with Peter Diamandis, chairman of the X Prize Foundation, which offers multimillion dollar prizes for technological breakthroughs. The school is backed by Diamandis and Google co-founder Larry Page. Google has already contributed more than $1 million to the institution, and several other major companies are planning to contribute at least $250,000, Diamandis said.

"One of the objectives of the university is to really dive in depth into these exponentially growing technologies, to create connections between them, and to apply these ideas to the great challenges [facing humanity]," said Kurzweil.

Nasa has agreed that the school can use buildings at its Ames Research Centre in Moffett Field, which is near the offices of US tech giants Google, Yahoo!, Intel Corp and Cisco Systems.

A nine-week course at Singularity University will cost $25,000. The first three weeks will be spent studying 10 different subjects, with the next three weeks focusing on one in detail. The final three weeks will be taken up by a special project. Details of the new institution, which despite its name is not an accredited university, are to be unveiled at the annual Technology, Entertainment and Design (TED) conference in Long Beach, California, today.

Kurzweil, who famously consumes more than 100 supplement pills a day and regularly checks around 50 health indicators, has been criticised by some experts who see his predictions as outlandish. In a 2007 interview, Douglas Hofstadter, the Pulitzer prizewinning author and professor of cognitive science at Indiana University compared his ideas to a blend of very good food and "the craziest sort of dog excrement".

In an earlier book, Fantastic Voyage: Live Long Enough to Live Forever, Kurzweil and co-author Terry Grossman lay out their vision of humans living radically longer lives within the next three decades or so.

The first step involves adopting a good enough diet and exercise regime to live long enough for biotechnology to unravel the ageing process and for nanotechnology to be capable of slowing it down and ultimately reversing it.

Among Kurzweil's other predictions are a pill that lets you eat what you want without getting fat – which he believes could be available within ten years; a world where all energy comes from renewable sources within 20 years; and a life expectancy that increases at a rate faster than you age within 15 years.

miércoles, 11 de febrero de 2009

Google y la NASA lanzan la Universidad de la Singularidad


Ray Kurzweil disertando en Singularity
Foto: Getty Images


Ray Kurzweil llamado el "Cibernostradamus" es inventor, futurista, experto en inteligencia artifical además de autor de libros sobre el futuro de la tecnologia como The Singularity Is Near: A True Story About The Future, donde proyecta la conjunción de la genética, la nanotecnología y la robótica para dar lugar a un mundo donde las máquinas de inteligencia artificial que se crearán en unos treinta o cuarenta años superarán el poder del cerebro humano. Ásegura que con esta tecnología se podrán resolver problemas agudos de nuestros tiempos como la escases de energía, la pobreza y el cambio climático, entre otros. Es tal el interés por el desarrollo de esta nueva tecnología que la NASA y Google acaban de destinar recursos para crear la Universidad Singularity a fin de impulsar su desarrollo como se explica en el siguiente artículo publicado recientemente.

EL Comercio
4 de febrero

Silicon Valley, la cuna mundial de la alta tecnología, abrirá este verano (boreal) la Universidad de la Singularidad, un centro académico único que, financiado entre otros por Google y la NASA, formará a los futuros líderes “para que identifiquen los grandes retos de la humanidad”.

Sus fundadores, los doctores Ray Kurzweil y Peter Diamandis, anunciaron la creación de este nuevo centro privado cuya sede estará en el campus Research Park de la NASA en Silicon Valley (California), a sólo unos kilómetros de la sede de Google y otros grandes del sector.

“La Universidad de la Singularidad está preparada para acoger a los líderes que crearán un creativo y único mundo del futuro”, dijo Kurzweil, autor y científico.

El nombre del centro hace referencia al libro de Kurzweil “The singularity is near”, en el que sugiere que los avances exponenciales en tecnología modificarán la vida humana hasta límites insospechados.

El científico es también conocido por su controvertida teoría de que los ordenadores llegarán a acumular un día tanto poder que dominarán el mundo.

Su compañero en este proyecto, Peter Diamandis, es un empresario espacial y presidente de la X Prize Foundation, una ONG que organiza cada año concursos en diferentes áreas para premiar avances que contribuyan al bien de la humanidad.

Junto a sus dos exóticos fundadores, el nuevo centro de estudios cuenta con diversos donantes de renombre como la NASA o el buscador Google, que ha contribuido con un millón de dólares.

La Universidad ha señalado que otras empresas han contribuido económicamente al proyecto, pero no ha facilitado sus nombres.

“Los retos de nuestro planeta son profundos”, dijo Vint Cerf, uno de los padres de la red y actual “jefe de evangelización de Internet” en Google. “Necesitamos los mejores corazones y mentes trabajando juntos por una causa única”, añadió en alusión al nuevo centro de estudios.

Denise Vardakas, portavoz de la Universidad de la Singularidad, dijo a Efe que en las primeras horas, tras anunciarse la apertura, recibieron ya “más de 50 solicitudes de estudiantes de todo el mundo interesados en asistir a nuestros cursos”.

La página web de la Universidad (www.singularity-university.org) se colapsó por el exceso de visitantes.

Sólo 30 tendrán el privilegio de asistir al programa que se iniciará este verano, aunque Vardakas aseguró que en el futuro esperan poder acoger hasta 120 estudiantes.

Inicialmente, la Universidad de la Singularidad ofrecerá un curso anual de nueve semanas de duración “orientado a los mejores estudiantes de grado y posgrado de todo el mundo”, aunque no ha especificado cómo se hará la selección.

Entre las asignaturas que estos alumnos de elite cursarán, están biotecnología y bioinformática, nanotecnología, robótica, inteligencia artificial, computación cognitiva, ciencias físicas y espaciales así como derecho, finanzas, política y ética.

Además, la Universidad ofrecerá cursos más breves de tres y diez días orientados a directivos y ejecutivos que les ayudarán a “determinar cómo estas tecnologías claves pueden transformar sus empresas dentro de cinco o diez años”.

Pero, además de competitivo, el acceso a la Universidad no es barato. El programa principal de nueve semanas costará a cada estudiante 25.000 dólares (19.000 euros) y aún no está claro cuánto costarán los cursos para ejecutivos de tres y diez días de duración.